¿Sabías que el conflicto entre padres y adolescentes forma parte de la normalidad? Es más, ¡es necesario! Forma parte del proceso de cambio y de la etapa. Qué os voy a contar yo…

Pero el conflicto en exceso es muy negativo tanto la familia como para los propios adolescentes. Si nos centramos en ellos, se ha visto que aquellos adolescentes que tienen más conflicto en su familia suelen tener menor autoestima, menor bienestar, menor ajuste escolar y más abuso de sustancias.

Por el contrario, un entorno familiar que brinda apoyo y desafío promueve la habilidad de los adolescentes para involucrarse y disfrutar de sus actividades, así como también la disposición a plantearse metas importantes para su futuro. Es decir, ¡mejora su bienestar! Y esto sin una buena comunicación no es posible.

¿Estás cansado de los conflictos que se generan cada vez que intentas hablar con tu hijo/a adolescente? ¿No entiendes por qué no quiere contarte sus cosas? ¿Quieres aprender a comunicarte mejor con él o ella? ¡No te pierdas este taller!

Mejoremos la comunicación con los adolescentes… así tendrán un mayor bienestar

(¡y tu también!)